Ureña, ¿el enésimo todo o nada?
Hoy Paco Ureña sustituye a Antonio Ferrera en la Feria de Otoño de Madrid. Será la segunda comparecencia del torero lorquino con la del domingo ante toros de Adolfo Martín. Sin duda, se ha echado sobre sus hombros una feria de muy poca gloria a priori y en el complicado mes de octubre. El enésimo desafío de un TORERO.
Lo más fácil, sin ningún genero de dudas, era hacer aceptado una terna el domingo con toreros de los que “no molestan” y pasar la feria sin más. Una feria que navega entre lo prometido por Casas (10 festejos que se han quedado en bastantes menos), la mala entrada de ayer (media), la casi nula presencia de figuras (Perera y Castella pueden tener ese título), gestos que enfrían (toros no emitió el festejo ayer) y la dura baja de Ferrera. Con un Pilar poco glorioso por delante, y sabedor que lo que se hace en octubre se olvida, lo más fácil era haber pasado el chaparrón. Pues no.
Ureña ha dado un golpe en la mesa anunciándose en la que más mal le puede hacer, Cuvillo. Una ganadería de figuras con la que Madrid le va a medir más que nunca y con la que se han estrellado “consentidos” de la capital. Aún así, el lorquino ha dado el golpe en la mesa para querer ponerse en figura arriesgando mucho. Esperemos que si triunfa se le valore.
El otro golpe es el domingo. Mano a mano con Juan Bautista. Sin duda la taquilla está a riesgo de resentirse y el peso recae sobre él, siendo sabedor de como los empresarios se “cobran” con determinados toreros resbalones como una mala taquilla. El riesgo es grande y más ante una ganadería dura y con un “consentido” de cierta prensa.
Pero esto es ser torero, jugarse la carrera a TODO o NADA y Ureña lo va a hacer hoy. Pese a una administración incapaz de vender un indulto (polémico o no, él lo debió vender), incapaz de vender el gesto de esta feria e incapaz de meter al diestro en carteles de figuras salvo muy contadas excepciones aún llevando la primera plaza del mundo.
No es la primera vez que Ureña se la juega pero este órdago sube los anteriores teniendo en cuenta como Madrid no hace prisioneros, menos aun con toreros de la empresa que tan mal está llevando su plaza (aunque no le estén mimando precisamente) y como el “sistema” tampoco. Veremos.
P.D. La foto elegida ilustra un triunfo en Sevilla con una faena de dos orejas ante Victorino cuyo premio fue volver a la misma el año siguiente.