La lluvia se puso de cara a Toñete (Crónica Las Ventas 21 Mayo)
Madrid ha celebrado su segunda novillada de abono marcada por un fuerte aguacero en el último novillo de la tarde que, como años atrás, ha convertido lo vulgar en extraordinario otorgando un trofeo que, seco, poco o nada pesa.
Se ha premiado a Toñete en una faena perfilera en la que ha aprovechado las embestidas del buen novillo de Mayalde para ligar muletazos con unos tendidos vacíos y con el mérito de aguantar un tormentón. Mérito de ser profesional y matar pronto para llevarse una oreja que nada pesa en una tarde, como una carrera, con todo a favor (con el contrasentido de esto por el agua, sin él…). OREJA
Ya en su primero se vio como la plaza estaba con él pese a que no entendió las bondades del animal con un trasteo de muleta muy retrasada y un oficio demasiado grande. Los pitos al saludar por su cuenta taparon una sorprendente ovación. DIVISIÓN. Los pocos pitos a la justa presencia del animal, sorprendentes.
El mérito de la disposición no puede tapar la exigencia que se le debe al novillero más rodado del escalafón y más cuidado, al margen de las tournés periodísticas que haga.
El otro lado mediático del evento lo representaba Alfonso Cadaval. Un novillero de gran voluntad pero al que se le ve valor justo que gustó cuando se puso ante las embestidas boyantes de su primer novillo pero al que se le vieron múltiples carencias cuando debía tirar de él. La petición de oreja fue rozando la mayoría, triste. OVACIÓN con la dignidad de no salir a pasear una vuelta por su cuenta.
En su quinto se perdió en dudas y carencias. SILENCIO.
Atienza, el convidado de piedra leyendo las previas del festejo, salió muy presionado tras su mala tarde de abril. Se le vio nervioso y con ganas de hacer más de lo que debía ante un manso primero con el que poco pudo hacer. Madrid le respetó. SILENCIO.
En el cuarto salió a portagayola con un precioso novillo de Mayalde. Pablo vio como se le iba la tarde en un desastroso tercio de varas nada mejorado por el de banderillas salvo Fernando Sánchez. En la muleta se fue a por todas quedando muy por debajo de un serio novillo que ofreció el triunfo. Solo algunos pasajes por el lado derecho recordaron lo que atesora el segoviano pero quedaron diluidos en una muy floja mano izquierda y en la poca claridad por el derecho. El descabello acabó de cerrar una tarde en la que los nervios le atropellaron.
BUENA NOVILLADA DE MAYALDE CON ALGÚN PUNTO DE MANSEDUMBRE EN LA QUE ATIENZA NO SE ACLARÓ, CADAVAL MOSTRÓ CARENCIAS PESE A GOTAS DE GANAS Y TOÑETE RECOGIÓ LOS FRUTOS DE SU OFICIO.
P.D. El ser torero es algo voluntario. Uno piensa en Ángel Sánchez, Carlos Ochoa… y se da cuenta que hay carreras que no son precisamente un camino de espinas en comparación… Solo ver como sale un torero tras diez novilladas antes de Madrid y con la alternativa hecha y comparar con el resto.
El tormentón una muestra más de lo bien que están cuidado los espectadores de este espectáculo. En fin…